El piloto de KH-7 afronta la prueba con el reto de conquistar su primer triunfo en la categoría de coches y ser el único español capaz de hacer doblete, tras vencer en motos en 2004.
En la celebración del décimo aniversario de su victoria, el de Folgueroles ha reconocido que “después de haber acabado segundo y tercero, ahora lo que quiero es vencer también en coches”.
Nani Roma ha celebrado hoy el décimo aniversario de su histórico triunfo en motos en el rally Dakar. Mientras soplaba las velas de un original pastel conmemorativo, el piloto de KH-7 pedía un deseo muy fácil de adivinar: ganar una década después y convertirse en el primer español que vence la mítica prueba en motos y coches.
“La victoria de 2004 fue un momento muy importante de mi vida, aunque es un hecho anecdótico que no debe desviarme de mi objetivo actual. Guardo recuerdos muy bonitos de aquel Dakar, pero aquello forma parte del pasado y ahora debo centrarme en el presente si aspiro a hacer un buen papel este 2014 en coches. Ya he acabado segundo y tercero y ahora lo que quiero es ganar”, confiesa Nani.
Tras calificar a Nani de “gran embajador” de KH-7, Josep Maria Lloreda, Presidente de KH Lloreda, ha reconocido que “sería excepcional que Nani volviera a ganar 10 años después, precisamente en Chile donde KH-7 acaba de debutar en el mercado, como una etapa más de una carrera diferente, pero también tan competitiva como el Dakar”.
Lograr el doblete ha sido el gran sueño de Nani Roma desde que en 2004 ganase sobre una KTM y decidiese pasarse a las cuatro ruedas. Diez años más tarde, espera celebrar la efeméride en lo más alto del podio el próximo 18 de enero. Esa fue precisamente la misma fecha en la que concluyó el raid por aquel entonces. Poco antes, Nani escribió premonitoriamente en su agenda electrónica que ese día ganaría el Dakar. Hoy, Josep Maria Lloreda le ha hecho entrega de una agenda de 2014, esta vez de papel, en la que el piloto de Folgueroles ha anotado su nueva tarea a cumplir, con el compromiso de desvelarlo al final de la carrera.
En 35 años de historia del Dakar, sólo dos hombres han sido capaces de hacer doblete en dos y cuatro ruedas: los legendarios Hubert Auriol (1992) y Stéphane Peterhansel (2004). En 2012, Nani se quedó a las puertas, al finalizar segundo en coches con su Mini ALL4 Racing. El año pasado también luchó por conseguirlo y logró más triunfos de etapa que nadie (4), pero al final tuvo que sacrificar el podio por bien del equipo y acabó cuarto. A partir del 5 de enero volverá a intentarlo con el mismo vehículo del team alemán X-Raid con el que lleva todo un año cosechando éxitos.
El piloto de KH-7 ha ganado todos los raids que ha disputado a lo largo de 2013, con una superioridad aplastante. Ha dominado pruebas internacionales como la Abu Dhabi Desert Challenge, el Desafío Ruta 40 de Argentina, la Baja España y la Baja Hungría. Nadie ha sido capaz de batirle en ninguna de ellas y su vehículo ha demostrado una gran fiabilidad sobre todo tipo de terrenos.
Todo ello permite a Nani afrontar la gran cita de la temporada con una enorme fortaleza, tanto física como mental: “Ha sido un año realmente bueno, en el que hemos disputado muchas pruebas y hemos podido acumular una gran cantidad de kilómetros. Además de hacer un gran trabajo, todas las carreras han acabado con victoria. Eso me permite afrontar esta edición del Dakar con mucha ilusión, aunque con la lógica prudencia porque este raid es muy duro”.
La experiencia acumulada a lo largo de sus 18 participaciones anteriores (9 en moto y 9 en coche) le aconseja máxima cautela: “El Dakar es una prueba muy complicada, que te obliga a estar súper concentrado cada día y en la que no puedes marcarte objetivos a largo plazo. Ganará el piloto que menos errores cometa. Al principio todo el mundo querrá ir muy deprisa y, aunque deberemos estar atentos, será importante no dejarse llevar por las emociones y pilotar con serenidad”, comenta el de Folgueroles.
En esta edición, la carrera tendrá más kilómetros de especiales y muchas complicaciones escondidas desde la primera jornada. “Creo que es un recorrido trampa aunque no habrá tanta arena como otros años cuando pasábamos por el desierto de Fiambalá. Pero no por ello será más fácil, porque habrá días muy largos y complicados. Personalmente, prefiero que haya dureza porque creo que en teoría eso nos favorece”, presagia el piloto de KH-7.
El Mini ALL4 Racing ha sido su gran aliado durante todo el año, mostrándose rápido, robusto y muy fiable durante todas las pruebas. Nani explica que “el equipo ha introducido modificaciones importantes en el modelo de este año, como el nuevo chasis, que nos permite disponer de un coche más rápido y fácil de conducir que nunca. Seremos más competitivos, pero eso tampoco quiere decir nada porque seguro que todo el mundo habrá mejorado”.
Su equipo X-Raid jugará varias bazas ganadoras, ya que junto a Nani Roma también correrán con Mini dos hombres que ya han ganado el Dakar otras veces: el francés Stéphane Peterhansel y el qatarí Nasser Al Attiyah. “Somos un equipo muy grande, pero la logística está bien organizada para que cada coche tenga una infraestructura independiente y su propio camión. Este año hay un gran nivel y la competencia dentro y fuera del equipo será grande por lo que, sobre todo al principio, deberé ser muy egoísta”.
Nani Roma volverá a tener a su lado al copiloto francés Michel Périn, considerado uno de los navegantes más experimentados del panorama rally-raid a nivel mundial. En su palmarés destacan tres triunfos en el Dakar, todos ellos junto a su compatriota Pierre Lartigue, y seis victorias en la Copa del Mundo al lado de pilotos diversos como Bruno Saby, Carlos Sainz y el propio Lartigue.
