Después de varios meses de parón, José Luis Espinosa, también conocido con el sobrenombre de ‘Caballero Negro’, regresará a la competición este próximo fin de semana con motivo de la Baja Italia, primera prueba puntuable para la Copa del Mundo FIM de Bajas.
El piloto madrileño, afincado en Arroyomolinos, acude a la cita transalpina con la intención de sentar las bases para revalidar el título de campeón del mundo de la categoría de quads a los mandos de un Can-Am Renegade. “Lógicamente, hay que defender el cartel de favorito que te cuelgan al ser el vigente campeón y eso exige salir con mentalidad ganadora. El objetivo es acabar en el podio, y si se puede ganar, mejor que mejor, aunque ésta es una prueba muy complicada y los puntos se venderán caros”, reconoce.
Espinosa, que fue la revelación del campeonato en la pasada temporada, se muestra consciente de cuáles son las claves para volver a erigirse en lo más alto: “Tengo muy claro que el calendario consta de seis pruebas y que la regularidad es primordial. Sé que no piloto el quad más veloz, y que hay contrincantes muy fuertes, pero espero sacar provecho de mis bazas”.
José Luis Espinosa, tercero scratch en quads y primero en la categoría 4×4 de la Baja Italia 2012, se las tendrá que ver este año con rivales de Francia, Polonia, Rusia, Hungría, España, Uruguay y, por descontado, los anfitriones italianos, que serán mayoría y parten con la gran ventaja de conocer muy bien el terreno.
“En la Baja Italia hay zonas muy rápidas en las que no puedo competir con los 4×2, pero en cambio tengo la ventaja de traccionar mejor gracias al 4×4 en los lechos de los ríos secos y en los vadeos, que no son precisamente pocos en esta carrera. Espero aprovechar esa circunstancia”, vaticina el piloto madrileño.
La vigésima edición de la Baja Italia tendrá un recorrido de casi 600 kilómetros repartidos en tres intensas jornadas de competición por la región italiana de Friuli-Venezia Giulia. El viernes por la tarde se celebrará una Súper Especial llamada ‘Royal Beach’, que se desarrollará entre las localidades de Cordenons y Zoppola, con 8 kilómetros cronometrados para abrir boca.
El sábado la prueba constará de 221 kilómetros, con 140 de especiales, mientras el domingo la distancia total a recorrer aumentará hasta los 313 kilómetros, 210 de los cuales serán cronometrados. La carrera se celebrará sobre cinco sectores selectivos.
Un total de 122 equipos han confirmado su participación en la prueba italiana, repartidos en las categorías de coches, motos, quads y camiones. En quads, competirán pilotos de primera fila, procedentes de siete países distintos.