David Serra sigue adelante en esta durísima edición del Dakar. El piloto de Vilanova de Bellpuig ha completado la sexta etapa y se sitúa 88º de la general de motos. Ha llegado a la meta de Calama después de pasarse medio día montado sobre su Yamaha y haber dormido la noche anterior apenas 4 horas.
“Estoy destrozado porque hoy ha sido otra etapa muy larga. Pensaba que no se iba a acabar nunca y, encima, me he equivocado de rumbo cerca de la llegada y he tenido que recular 25 kilómetros. Ha sido el colmo y me ha sabido muy mal, pero lo importante en definitiva es que sigo en carrera un día más”, explicaba Serra.
La jornada ha comenzado con un madrugón para los pilotos a causa del cambio horario al pasar de Perú a Chile (2 horas menos). Por delante les aguardaban 438 kilómetros cronometrados más otros 331 de enlace. “He pasado casi 12 horas sobre la moto y estoy muy cansado después de un día durísimo. Además, he sufrido una caída sin gran importancia, aunque siento molestias en la muñeca”.
Tal y como le sucedió ayer, David Serra no ha dudado ni un instante en detenerse a echar una mano a quien necesitaba de su auxilio. Concretamente, ha ayudado a reincorporarse a la carrera al veterano Miguel Puertas que había desllantado una rueda de su Gas Gas.
A pesar de todos los contratiempos, el piloto ilerdense de 43 años ha conseguido cruzar entero la meta de Calama. Lo ha hecho en 94ª posición scratch de dos ruedas con un tiempo de 5h 15’07”. En la general, se sitúa en el puesto 88º, con un tiempo total de 21h 38’56”.
El principal deseo de David Serra era llegar al campamento lo antes posible para reponer fuerzas en su saco de dormir, ya que mañana le aguarda otra auténtica ‘paliza’ durante la séptima etapa entre Calama y Salta, con otros 800 kilómetros a recorrer, entre los 218 cronometrados y los 585 de enlace.
