El tradicional mini-campeonato de Holanda de pilotos del Dakar atrajo a más de 27000 personas. La tercera nación representada en el rally se mostró lista para conquistar Sudamérica.
La cita es ineludible. Cada año, los competidores holandeses del Dakar se encuentran para un pre prologo donde cada uno devela los vehículos recientemente salidos de los talleres, y comienza a hacer hablar su manillar o su volante. El preestreno del Dakar 2013, en su versión bátava, se realizó domingo en un circuito de tierra acondicionado en cercanías a Eindhoven. Gerard De Rooy, líder de la delegación que viajará en masa a Lima a principios de enero, hizo valer su estatuto de poseedor del título en los 2,5 km del Eurocircuito de Valkenswaard, donde una vez más saboreó el apoyo recibido: “Pilotar en medio de esta multitud, es extraordinario. El camión está listo para el rally”, celebró después de haber obtenido el mejor tiempo, delante de Peter Versluis.
En dos ruedas, Frans Verhoeven continuo con éxito la preparación de su primer Dakar al mando de una Yamaha, aventajando en especial a HenkNuiman, pero también el recién llegado Robert Van Pelt, que con sus 19 años será el piloto más joven en la largada del rally. En auto, Jurgen van den Goorbergh, un ex-motorista instalado en un buggy monoplaza que tomó la delantera ante el Mitsubishi Lancer de Erik Van Loon. Sin embargo, el ex piloto de moto GP se espera ver invertir los roles en América del Sur:”El terreno era realmente perfecto para mi buggy. En Valkenswaard tuve suerte, pero Erik será más rápido que yo en el rally”.