En el seno del equipo Ford, están satisfechos con la actuación de Petter Solberg en Montecarlo, aunque no con las prestaciones de su actual coche, el Ford Fiesta RS WRC, para ello los responsables de M-Sport no han dejado de trabajar a para tener a punto la segunda evolución de este modelo. Todo ello con el único propósito de llegar a la competitividad de su máximo rival en el WRC, el Citroën DS3 WRC.
El equipo está deseo por alcanzar el potencial del coche francés y si todo sigue su ritmo será en el próximo Rallye de Portugal cuando esta segunda evolución vea la luz. Y tanto Jari-Matti Latéala, como Solberg puedan estar a la altura de los imbatibles Citroën.