El piloto Repsol intentará sumar en el desierto de los Monegros su tercer título en la cita española más prestigiosa de la especialidad. Mañana viernes, el recinto de Motorland Aragón acogerá la etapa prólogo de la XXVIII edición de la Baja España-Aragón, pistoletazo de salida para la clásica prueba española que este sábado y domingo recorrerá el desierto de los Monegros. En la categoría de motos, Marc Coma se postula como uno de los principales favoritos, después de sus victorias en las ediciones de 2004 y 2008, y las de este año en el Dakar, y en los Rallys de Abu Dhabi y Cerdeña.
El piloto Repsol se enfrentará un año más al rápido y exigente recorrido de la cita aragonesa, que nuevamente superará los 1.000 kilómetros, 610 de ellos cronometrados. Serán dos especiales cada día, 130 y 175 kilómetros, en un recorrido exigente y espectacular por lo zona de los Monegros situada al norte de Zaragoza, en recuerdo a los trazados de las primeras ediciones de esta épica carrera.
Al manillar de una KTM 530 EXC, una moto puramente de enduro en lugar de la 450 Rally —moto habitual de Coma en las pruebas en el desierto—, el piloto Repsol se verá las caras con 31 participantes, entre los que destacan el actual campeón de la cita, Marc Guasch, y Gerard Farrés, antiguo compañero de equipo y ganador de la carrera en dos ocasiones.
Marc Coma: «La Baja no estaba en nuestros planes iniciales de la temporada, pero al no ir al Rally de Túnez, ya llevaba mucho tiempo sin competir. Es una competición que se escapa un poco de nuestra especialidad, ya que no hay navegación y es en todo momento al sprint, con todos los caminos marcados con flechas. Pero es la carrera de este tipo más importante de Europa y, aunque hace dos años que no participo, estoy contento por volver a disputarla. Este año iremos más hacia el norte de Zaragoza, una zona por la que no he competido nunca, pero siguen siendo los Monegros y el paisaje no cambiará mucho al que estamos acostumbrados».