Los competidores centroeuropeos solían lograr buenos resultados en el Dakar, pero el Silkway Rally nunca había sido un objetivo para ellos, al menos no hasta ahora. Este año habrá pilotos tanto novatos como experimentados en la línea de salida de este evento del Dakar Series organizado en su vecino del este.
El mejor año del Dakar para Hungría fue 2005, cuando todas las escuderías que tomaron la salida (4 coches, 2 motos y 2 camiones) logran rebasar la línea de llegada a orillas del Lago Rosa. Como consecuencia de la crisis económica, el número de competidores húngaros en la mayor carrera cross-crountry se redujo a 1 ó 2 equipos. László Liszi fue de hecho el único competidor en la pasada edición del Silkway Rally, si bien en el 2011 se incorporará a la carrera el defensor del título húngaro Balázs Szalay. La última vez que compitió fue en el desierto, allá por enero de 2009. “Oí a un piloto decir que el Silk Way es una carrera fantástica, así que estoy ansioso por comenzar. Nos hemos enterado de que van a participar los mejores equipos, así que será un importante desafío antes del Dakar que nos permitirá saber dónde estamos respecto de los mejores pilotos del mundo y el camino que nos queda por recorrer”, comenta Szalay. Incluso un camión húngaro se desplazará hasta Rusia para medirse con los Kamaz. Miklós Kovács no puede ocultar sus ganas de poner a prueba su Scania en la estepa. “Nuestro año empezó con el pie torcido, tras un tremendo salto sobre una duna en Marruecos en el que rompimos el eje de transmisión del camión. Espero que los inicios en el Silk Way sean más tranquilos y que podamos competir contra los mejores pilotos y firmar un buen resultado”.
Este año los campeonatos de rally raid nacionales de Hungría, Eslovaquia, República Checa y Polonia comparten dos eventos, de manera que los equipos ya se conocen. De hecho, el checo Miroslav Zapletal (que finalizó 7º en el Dakar) fue campeón en Hungría hace dos años, así que no es la primera vez que se enfrentan entre sí. Mirek compró un BMW X3 de la casa X-Raid este año que le llevó a la cuarta posición en Túnez. Todavía no ha decidido si participará en Rusia con su nuevo bólido o con el Mitsubishi Strakar. “Participé en mi primer Silk Way en 2009 pero desgraciadamente tuvimos problemas con el motor y nos vimos obligados a abandonar. Espero que este año, el de mi regreso, culmine con un buen resultado,” destaca Miroslav. Entre los competidores de la República Checa destacan Josef Pelc y su esposa, que hará las veces de copiloto, al volante de un Hummer H3, y Zdenek Sládek, también al mando de un Hummer, en este caso preparado por el equipo OffroadsportCZ de Zapletal.
Polonia ostenta actualmente el título del campeonato mundial; Krzysztof Holowczyc fue el vencedor de la FIA Cross-Country Bajas en 2010 y ha terminado el Dakar en 5ª posición en dos ocasiones (2009 y 2011). “Nunca he competido en la región rusa por donde discurrirá el Silk Way pero sí tuve la ocasión de tomarle el pulso al terreno del país. Fue sin embargo en un escenario bien distinto, durante el invierno. El Silk Way será sin duda una experiencia interesante que nos deparará, seguro, no pocas sorpresas. Para nosotros este rally es la verdadera prueba antes del Dakar. Será una competición larga y difícil. Gracias al compromiso de mi patrocinador, PKN ORLEN, tendré la oportunidad de pilotar de nuevo el BMW X3 CC con la más alta especificación disponible preparado por el equipo X-Raid. No me cabe ni la menor duda de que el equipo nos preparará bien. Hemos realizado algunos cambios de fabricación en el vehículo y mejorado el centro de carga. Además, estamos mejorando la suspensión, así que creo que el coche será más rápido que durante el Dakar 2011”, afirma Krzysztof Holowczyc, piloto del equipo ORLEN.
Juraj y Danka Ulrich, bicampeones nacionales y ganadores del 2010 FIA CEZ T2 Trophy, serán el primer equipo eslovaco en la historia del Silk Way Rally. De hecho, es también la primera vez que un equipo de coches eslovaco competirá en un rally del Dakar Series. Su principal objetivo es llegar a la línea de meta final en su primer intento. Será complicado, pues compiten con un coche de serie, que es más o menos como el modelo que encontramos en un concesionario con ajustes menores, centrados sobre todo en la seguridad del equipo, y contarán con el apoyo de un único coche de asistencia.
