El piloto de Citroën, Sebastien Ogier podría conseguir dos victorias consecutivas en el Vodafone Rallye de Portugal después de alzarse como líder el segundo día con una ventaja de casi 40 segundos. El, hasta ayer, lider Jari-Matti Latvala dejó de serlo en el TC10 pero perdió todas las opciones cuando rompió un eje de transmisión dos tramos más tarde. Al final de último tramo Ogier comentaba: “Ahora todo es perfecto pero aún quedan 100 km y muchos pilotos tienen problemas. Todo debería ir bien pero no hemos terminado”.
Su compañero de equipo Seb Loeb tenía claro que atrapar a su compañero sera prioritario en los tramos de hoy, aunque Ogier debe limpiar la pista. “Creo que mantendrá la ventaja”, afirma Loeb. “Será difícil atraparle porque está lejos. Pensaba que era probable pinchar en el último tramo y por esto fui más despacio”.
Después del fallo en la transmisión, el líder de ayer, Latvala, está ahora a 4m14.6s de Ogier. Mikko Hirvonen empezó el segundo día seguro de si mismo y con opciones de victoria pero tuvo problemas al pinchar la rueda delantera derecha en el TC9. El líder del campeonato rompió la suspensión trasera en el TC13. Como resultado el finlandés empezará el domingo quinto de la general, una plaza por detrás de Wilson. “Podríamos haber tenido un buen final pero ahora ya no”, afirma Hirvonen. El británico Wilson está por delante de su compañero de M-Sport Stobart Henning Solberg y escaló a cuarto cuando Hirvonen bajó el ritmo en el TC13. “Es increíblemente complicado saber qué velocidad tomar, ir rápido o ir más despacio para evitar incidencias”, afirma Wilson.
Araujo con su MINI John Cooper Works Súper 2000, comenzó el segundo día en el séptimo puesto, pero se enfrentó a una tarea difícil para mantener la posición después de verse obligado a correr todo el día con un bajo rendimiento del motor. Un pinchazo en el tramo 11 y un fallo en el motor en el siguiente frustraron todavía más al portugués.