La última especial del Dakar en Chile ha sido la causante de numerosos abandonos pero hay unos cochecitos casi de juguete que son capaces de sacar los colores a casi cualquier 4×4, se trata de los Buggies McRae. Estos pequeños coches son un hibrido entre coche, quad y moto de nieve. El proyecto nació en Escocia en el seno de la familia McRae, Colin y su hermano Alistair diseñaron estos divertidos y económicos buggies para las pruebas de raids. Desde el 2009 el proyecto pasa a manos del equipo ProDakar y el 1 de enero de 2010 se lanzaron a la aventura en el Dakar. El precio que pagaron fue muy alto ya que la transmisión sufría mucho con la arena y solo Tim Coronel consiguió llegar a la meta, pero la semilla estaba sembrada.
Para este año fueron siete los pilotos que se inscribieron con la nueva versión del buggy. Entre ellos el español Albert Bosch que se vió obligado a abandonar al errar el camino marcado y atascarse en una poza de arena. El catalán se ha deshecho en elogios sobre el comportamiento del coche. Debido a un toque salía muy retrasado y tenía que lidiar con los camiones, y como la altura del buggy es similar a la altura de la rueda de los enromes camiones no lo tuvo nada fácil.
En las dos últimas etapas han sido dos los pilotos que han escalado posiciones, Tim Coronel y Emiliano Spataro han conseguido finalizar los dos últimos días entre los 25 mejor clasificados. Esto es un logro increíble para un coche de tan pequeña envergadura de tamaño y precio. Ya que con un presupuesto de moto competitiva están luchando contra los coches de gran presupuesto.