La Plaza de los Héroes de Budapest despidió el pasado sábado a los participantes del Budapest Bamako que partían hacia el sur de Europa con 8500 kilómetros de recorrido por delante. El equipo formado por los eslovacos Juraj Ulrich y Daniela Ulrichova a bordo de un Nissan Navara buscan su cuarta victoria en la categoría competición.
La primera etapa sorprendió a todos por su dificultad, 20 puntos de control más uno que servía de comodín se encontraban en la ruta de 1094 que unía Budapest con Génova en Italia. Los siguientes tres días de etapa maratón con una distancia de 2342 kilómetros fue aun más dura que la primera. 69 puntos de control que incluían tres comodines y un estricto control horario de llegada pusieron de relieve las tácticas de cada equipo. Algunos optaron por dejar puntos de control para ahorrar tiempo, pero este no fue el caso de la pareja eslovaca. Con un esfuerzo extra y a costa de horas de sueño consiguieron completar los CP y embarcar en el último ferry que salía de Algeciras rumbo a Marruecos.
El cansancio y la falta de sueño les pasó factura cuando el equipo Rasid Adventure se percató que no habían repostado gasoil y tampoco habían llenado los depósitos de agua. Se quedaron bloqueados en las montañas, por suerte tres de sus rivales les echaron una mano demostrando que el espiritu de compañerismo sigue vivo en el Budapest Bamako. Los Ulrich’s quieren aprovechar este medio para agradecer a los equipos Tran Hungaria, Vadludak Racing Team y el Team Oljeskiftexpressen su ayuda en la etapa.
La etapa súper maratón finalizó en Khenifra y tras un breve descanso ponían rumbo a Tazzarine y en estos momentos el equipo, que ha sobrevivido a los cinco primeros días con solo ocho horas de sueño, se encuentra en primera posición con 272 puntos.