El KH-7 Epsilon Team estará una vez más en la salida del Dakar con una tripulación que repite por quinta vez. La formación de este camión se mantiene como una de las más sólidas y longevas. Está capitaneada por Jordi Juvanteny, al volante, y José Luis Criado, al road-book. De las 19 y 20 participaciones que llevan a sus espaldas, respectivamente, han vivido las últimas 16 juntos ininterrumpidamente, y desde 2006 comparten cabina con Fina Roman.
En toda su trayectoria en el Dakar, Juvanteny y Criado han sumado ocho trofeos como vencedores de la categoría de camiones 6×6, un palmarés que nadie ha superado. Por su parte, Fina Roman ha vivido éxitos y abandonos a partes iguales con el equipo, dos victorias de 6×6 y dos abandonos, además de la cancelación del rally en 2008.
Nacida en Almería, pero afincada desde hace años en Pals (Girona), Fina repite como única representante española de la categoría de camiones, algo que para ella no es ningún inconveniente. «Al principio, cuando una mujer entrar por primera vez en un ambiente como el del Dakar, quizá despierta ciertas reticencias, pero sólo de una minoría. La mayor parte de la gente es muy amable, quizá porque les parece extraño que una mujer vaya en un camión o quiera participar en el Dakar. Después, con el paso de los años, todos te conocen y te valoran, y te sientes como uno más», dice Roman.
El objetivo de este cohesionado equipo es reeditar su dominio y luchar por mantenerse entre los diez primeros. «En las dos últimas ediciones hemos finalizado novenos de la clasificación general de camiones, primeros de la división 6×6 y segundos de la categoría de producción. Nos gustaría repetir el éxito, e incluso ampliarlo, pero cada vez es más difícil», comenta Juvanteny.
Ciertamente, en el Dakar 2011 habrá más camiones prototipos y de producción que, según Criado, venderán muy cara la derrota: «a pesar de nuestros éxitos, nunca hemos logrado hacernos con la victoria en el apartado de producción, porque nosotros vamos con un camión 6×6 que, por lo general, es menos competitivo que un 4×4 de serie. Hemos acariciado la victoria varias veces, pero ahora vuelven equipos muy fuertes y estará muy reñido».
En la pasada edición, el KH-7 Epsilon Team sufrió una progresiva y aparatosa ruptura de la cabina del camión, algo que se ha resulto con varias modificaciones mecánicas: «el problema que tuvimos es que la suspensión resultó ser excesivamente firme y eso transmitía demasiadas vibraciones que causaron de las grietas en la carrocería. Para evitarlo, hemos mejorado la suspensión con amortiguadores con un tope hidráulico en el eje delantero y hemos eliminado algunas ballestas en la parte trasera», reconoce Juvanteny.
Al margen de estas modificaciones, el MAN del KH-7 Epsilon Team, partirá con las mismas armas: fiabilidad y buena capacidad de tracción. La destreza al volante, la compenetración y la regularidad será cosa de la tripleta Juvanteny, Criado y Roman.