Comunicado de prensa._Los pilotos Kamaz, conocidos por su capacidad de acaparar títulos, siete de las ocho últimas ediciones del Dakar han sido ganadas por uno de ellos; también tienen su punto débil: el exceso de confianza. Vladimir Chagin, un maestro del volante, no duda en explotar al máximo su camión. Pero sus ganas de velocidad y de espectáculo, lo han llevado, algunas veces, a cometer errores. Tanto es así que, probablemente, sus salidas de pista, han sido las culpables a la hora de contar la victoria en tres ediciones del Dakar (2005, 2007, 2009). Incluso, la frecuencia de errores que comete Chagin, pone a pensar si estar en el puesto No.2, ¡no forma parte de la programación de Kamaz! Firdaus Kabirov quien logro sacar el mayor beneficio de esta posición en el 2005 y en el 2009, aprovechó otra vez, un éxito caído del cielo “gracias” a Chagin en la primera edición del Silk Way Rally, en septiembre pasado. Este año, el Tsar confía en el destino para ganar un sexto título, que, en el palmarés de la prueba, lo pondría a igual con Karel Loprais,. En esta ocasión, en el asiento de la derecha, se encuentra un navegante, que ya había formado parte en dos títulos de Chagin: la primera victoria (2000) y la última (2006). En efecto, Semen Yakubov, team manager de Kamaz, vuelve a la cabina para participar en la lucha por el triunfo.
Los tres camiones azules inscritos, también están listos para vivir a fondo los 9.000 km del exigente recorrido que les espera. Pero sobre todo, deberán contener las intenciones de Ales Loprais, que está dispuesto a enfrentarse a los Kamaz, en Argentina y en Chile. Aparentemente, se solucionaron los frecuentes problemas técnicos de su camión Tatra, vividos en la edición 2009. Además, el sobrino de Karel, 3ro en el Silk Way, también podría sacar provecho del particular contexto que se presenta este año: Gerard De Rooy, quien de hecho es uno de los competidores rusos más constantes, está curando una herida que se hizo en la última etapa del Silk Way, en Turkmenistán. Bajo estas condiciones, varios outsiders pueden dar una sorpresa en la clasificación o inscribir sus nombres en algunas de las etapas. También puede ser el momento de André de Azevedo (Tatra), o de Wulfert Van Ginkel (Ginaf) e incluso de la familia de Sugawara (Hino).