Arnau Bisquerra, redacción. El 45 Rallye Rias Baixas Vodafone acabó con polémica tras los hechos acaecidos en el noveno tramo donde los hermanos Vallejo, líderes de la carrera, rompían un palier de su Porsche 911. El trayecto desde el tramo hasta el parque de trabajo fue un auténtico calvario para el Porsche que tuvo que cubrir los 50 kilómetros a duras penas. Lo peor estaba por llegar en la entrada al Parque de Asistencia que estaba formado por dos cuestas.
En la primera de ellas el Porsche era empujado por el Mitsubishi de Álvaro Muñiz, algo que vieron multitud de personas e incluso fue emitido en directo por una emisora de radio. Además al llegar al control de entrada hubo nervios al encontrarse con el coche de Enrique García Ojeda que estaba esperando su minuto para entrar en la hora prevista.
Al final no hubo reclamaciones por parte de ningún equipo, aunque los hechos están a la vista y todo queda en manos de lo que decidan los oficiales de la RFEA.
