Antonio Vico vivió por fin su debut en el Rally Dakar con la disputa de la primera etapa, que enlazó Buenos Aires con Santa Rosa. El piloto español ha finalizado en 84ª posición, un resultado muy digno teniendo en cuenta que era la etapa inaugural y que hasta entonces no había tenido oportunidad de probar el coche, un Bowler Nemesis.
“Durante el enlace he aprovechado para ir conociendo el coche porque hasta ahora no había hecho ni diez kilómetros con él. Al principio del tramo he ido tanteando para ver cómo reaccionaba. He tenido un par de sustos pequeños, pero a medida que iba avanzando la especial me he ido sintiendo cada vez mejor y todo ha salido muy bien. El coche tiene un gran potencial y ahora sólo falta que día a día vaya cogiendo más confianza para ir mejorando el rendimiento”, comenta Antonio Vico.
En esta su primera participación, el piloto barcelonés ha destacado como el segundo mejor piloto español privado detrás de Javier Herrador (73º), que va copilotado por Víctor Vico, hijo de Antonio.
Según el jefe del equipo Competició Desert, “esta primera etapa ha sido muy rápida. Podíamos haber corrido más pero los caminos eran estrechos y traicioneros, además el 70% del tramo lo hemos hecho metidos dentro del polvo de los coches que nos precedían y era absolutamente imposible adelantar. No tenía sentido arriesgarse porque queda mucha carrera y hoy el que no tuviera cuidado podía acabar muy mal parado”.